Procesos del aparato digestivo
La Digestión
Estructura histológica
del tubo digestivo
Hay cuatro capas en la pared del tubo
digestivo:
- Epitelio o
mucosa digestiva. Va a ser estratificado en
aquellos segmentos en contacto con segmentos alimenticios grandes: boca,
faringe, esófago y ano. El epitelio presenta glándulas mucosas productoras de
moco, con función protectora y lubricante.
- Submucosa. En esta Submucosa va a haber una gran abundancia de vasos
sanguíneos. En ella se encuentra el plexo (red) submucoso de Meissner, este
plexo es de carácter nervioso vegetativo, es el primer nivel de regulación
digestiva. Va a formar parte del sistema neuroentérico intrínseco. El plexo
submucoso va a tener un papel principal de regular la secreción de las
glándulas.
- Capa
muscular externa. Encontramos dos capas de fibras
musculares; la primera capa es circular y por encima de ella está la capa
muscular longitudinal. En esta capa más externa se encuentra el plexo
mientérico de Auerbach, que es el primer componente del sistema neuroentérico
intrínseco, actúa sobre el músculo del tubo digestivo, es decir regula la
motilidad muscular.
- Capa
externa. Está formada por la adventicia (o
capa más externa del tubo digestivo) o por la serosa que recibe el nombre de
peritoneal. El peritoneo recubre a gran parte de estructuras intraabdominales.
Túnicas del Tubo digestivo
La Boca
La boca es la primera parte del tubo
digestivo aunque también se emplea para respirar. Está tapizada por una
membrana mucosa, la mucosa oral, con epitelio plano estratificado no
queratinizado y limitada por las mejillas y los labios. El espacio en forma de
herradura situado entre los dientes y los labios, se llama vestíbulo y el
espacio situado por detrás de los dientes es la cavidad oral propiamente dicha.
El techo de la cavidad oral está formado por el paladar que consiste en dos
partes: una ósea llamada paladar duro, formada por parte de los huesos maxilar
superior y palatinos y otra, formada por músculos pares recubiertos de mucosa,
llamada el paladar blando o velo del paladar, que se inserta por delante en el
paladar duro y, por detrás es libre y presenta una proyección cónica en la
línea media, la úvula. A cada lado del paladar blando hay dos músculos
recubiertos de repliegues verticales de mucosa que constituyen los dos pilares
anteriores y los dos pilares posteriores del paladar y forman el istmo de las fauces
o puerta de comunicación de la cavidad oral con la parte oral de la faringe u
orofaringe. Entre los pilares, en cada lado, se encuentra una colección de
tejido linfoide que constituye las amígdalas palatinas (que cuando se infectan
son llamadas popularmente anginas) cuya parte visible no es una guía exacta de
su tamaño real porque una gran porción de ellas puede estar oculta por detrás
de la lengua. Por su parte anterior la cavidad oral se comunica con el exterior
por la abertura de la boca.
En la cavidad bucal ya empieza
propiamente la digestión: la digestión química ocurre por acción de las
glándulas salivales y la digestión mecánica ocurre por acción de los dientes.
En la boca el alimento ingerido es triturado por los dientes y transformado en
bolo alimenticio con la ayuda de la saliva y la lengua. Además, la boca regula
de forma fundamental el proceso de vocalización para transformar el sonido
laríngeo en lenguaje humano.
La boca
La Faringe
La faringe es un tubo que continúa a la
boca y constituye el extremo superior común de los tubos respiratorio y
digestivo. En su parte superior desembocan los orificios posteriores de las
fosas nasales o coanas, en su parte media desemboca el istmo de las fauces o
puerta de comunicación con la cavidad oral y por su parte inferior se continúa
con el esófago, de modo que conduce alimentos hacia el esófago y aire hacia la
laringe y los pulmones. Para una mejor descripción se divide en 3 partes: nasofaringe,
situada por detrás de la nariz y por encima del paladar blando, orofaringe,
situada por detrás de la boca, y laringofaringe, situada por
detrás de la laringe. Debido a que la vía para los alimentos y el aire es común
en la faringe, algunas veces la comida pasa a la laringe produciendo tos y
sensación de ahogo y otras veces el aire entra en el tubo digestivo
acumulándose gas en el estómago y provocando eructos. La orofaringe es la
parte oral de la faringe y tiene una función digestiva ya que es continuación
de la boca a través del istmo de las fauces y está tapizada por una mucosa
similar a la mucosa oral. La orofaringe está limitada por arriba por el paladar
blando, por abajo por la base de la lengua, en donde se encuentra una colección
de tejido linfoide llamada amígdala lingual, y por los lados por los pilares
del paladar anteriores y posteriores.
La faringe Se extiende desde la base
del cráneo a nivel del hueso occipital hasta la 4ª o 5ª vértebra cervical. A
este nivel presenta una abertura anterior dando paso a la laringe y a una
abertura inferior dando paso al esófago. Tiene forma de embudo, con la parte
más ancha hacia arriba; mide unos 14 cm de longitud, alargándose y acortándose
en los movimientos deglutorios. La faringe es, también, un órgano al servicio
del habla, pues actúa como cámara de resonancia de la voz y los músculos que la
configuran se mueven durante la emisión de las palabras.
La faringe está formada por un tubo
muscular conectivo. En su capa muscular se van a encontrar tres músculos que
reciben el nombre de constrictores de la faringe: superior, medio e inferior.
Los dos primeros reciben una rica
inervación del vago y del glosofaríngeo (IX par craneal). La función de los
músculos constrictores es avanzar el bolo alimenticio y provocar la
apertura/cierre de orificios contenidos en su cara anterior.
Básicamente, las tres funciones de la faringe
son:
- Función
deglutora, mediante la cual empuja
el bolo alimenticio hacia el esófago.
- Función
respiratoria, porque permite el paso de
aire proveniente de las fosas nasales.
- Función
fonatora, porque interviene
en la formación correcta de la fonación.
La faringe y sus músculos
El Esófago
El esófago es un conducto muscular
revestido de mucosa que une la faringe con el estómago. Su función es conducir
el alimento al estómago durante la deglución y facilitar activamente su tránsito;
además, impide el reflujo del alimento hacia la faringe. Habitualmente es una
cavidad virtual, es decir, sus paredes se encuentran unidas y solo se abren
cuando pasa el bolo alimenticio.
El esófago comienza a la altura del borde inferior del cricoides, frente
a la sexta vértebra cervical, y termina abriéndose en el estómago por el
orificio del cardias a nivel del flanco izquierdo de la undécima vértebra
torácica.
En su trayecto descendente recorre la
parte inferior del cuello, y el tórax, atraviesa el diafragma por el hiato
esofágico y alcanza el abdomen, donde se continúa con el estómago por el
cardias. En todo este trayecto se sitúa por delante de la columna vertebral, si
bien, a medida que se aproxima al diafragma, se va separando de ella. Según su recorrido
se distinguen cuatro porciones: cervical, torácica,diafragmática y abdominal.
El esófago tiene una longitud media que
está muy relacionada con la talla y es de unos 25 cm en el varón y 23 cm en la
mujer. (Desde el labio inferior a la entrada hay 15 cm y hasta el cardias,
entre 40-45 cm.).
El trayecto del esófago presenta una
serie de curvas tanto en el plano sagital como en el frontal. En el plano
sagital, el esófago se adapta a la curvatura de la columna y es, en
consecuencia, ligeramente cóncavo hacia delante. En el plano frontal, el
esófago es primero vertical y se ubica en la línea media; luego, a la altura de
la vértebra T4, el cayado de la aorta lo desplaza ligeramente hacia la derecha;
finalmente, cuando la aorta se ha hecho posterior al esófago, hacia T7, éste se
desvía hacia la izquierda hasta su terminación.
El esófago
El Estómago
El estómago es un órgano ubicado en el lado izquierdo y superior del
abdomen, que varía de forma según el estado de repleción (cantidad de contenido
alimenticio presente en la cavidad gástrica) en que se halla, habitualmente
tiene forma de J.
Consta de varias partes que son: fundus, cuerpo, antro y píloro. Su
borde menos extenso se denomina curvatura menor y la otra curvatura mayor. El
cardias es el límite entre el esófago y el estómago y el píloro es el límite
entre estómago y duodeno. En un individuo mide aproximadamente 25cm del cardias
al píloro y el diámetro transverso es de 12cm.
El estómago es una dilatación del tubo
digestivo situada entre el esófago y el duodeno, con una capacidad aproximada
de 1-1.5 litros. Difiere del resto del tubo digestivo en que su pared tiene una
tercera capa de fibras musculares lisas orientadas de modo oblicuo y situadas
en la parte interna de la capa circular. La mayor parte del estómago se
encuentra situado en el epigastrio aunque ocupa también parte del hipocondrio
izquierdo. Se relaciona por delante con el lóbulo izquierdo hepático y el
reborde costal izquierdo, por detrás con el riñón izquierdo, por encima con el
diafragma y por debajo con el colon transverso y su mesocolon. Si consideramos
que el estómago tiene forma de J, se puede distinguir una porción vertical y
otra horizontal. El pliegue que está entre las dos porciones se llama incisura
angular. Un plano que pase por la incisura angular y otro que pase por la unión
esófago-gástrica delimitan varias partes:
El fundus o fórnix, es la parte más
alta del estómago. Está situado en la parte superior y a la izquierda del
orificio de comunicación con el esófago o cardias. El ángulo que se forma entre
el fundus y el cardias ayuda a evitar el reflujo gastroesofágico y las hernias
de hiato (deslizamiento de parte del estómago al interior de la cavidad
torácica).
El cuerpo, es la zona comprendida entre
el fórnix y la incisura angular. Está limitado a ambos lados por las curvaturas
mayor y menor.
La porción pilórica o píloro, tiene
forma de embudo y es la zona comprendida entre la incisura angular y el
esfínter pilórico, que separa al estómago del duodeno. El píloro se divide en
una porción proximal o antro pilórico, que es la parte más ancha, y una porción
distal o canal pilórico, que es más estrecha.
El estómago recibe, almacena, mezcla y
absorbe el bolo alimentico y lo trasforma en una papilla llamada quimo,
y luego lo impulsa al intestino delgado. Segrega un líquido poderoso (jugo
gástrico) y un líquido espeso (moco)
El estómago
Intestino
Delgado
Es la estructura más larga del sistema digestivo. Tiene forma de tubo
cilíndrico enrollado y hueco y mide unos 6 metros de longitud por 3 cm de
ancho. Está ubicado en el abdomen, formando numerosas curvas (asas intestinales)
con el fin de ocupar menos espacio. Por arriba se comunica con el estómago y
por debajo con el intestino grueso mediante un orificio transversal llamado
válvula ileocecal. Consta de 3 partes, duodeno, yeyuno e íleon.
El duodeno es la porción inicial del intestino delgado; en él comienza
la absorción del alimento y se vierten secreciones digestivas importantes,
tales como la bilis y el jugo pancreático. Se extiende desde el píloro hasta el
ángulo duodenoyeyunal, punto donde se continúa con
el yeyuno. En su trayecto dibuja un asa de concavidad izquierda situada a la derecha de la línea mediosagital del abdomen. El asa duodenal encierra la cabeza y el cuello del páncreas, a los que se adhiere. La longitud del duodeno
es de 25 a 30 cm.
El duodeno
tiene unos 25 cm de longitud y se extiende desde el píloro hasta el ángulo
duodeno-yeyunal, rodeando la cabeza del páncreas. Con fines descriptivos se
divide en 3 porciones: primera, segunda y tercera. Igual que sucede con el
páncreas, el duodeno está cubierto por peritoneo solamente por su cara
anterior, por ello se le considera órgano retroperitoneal. Se relaciona con el
estómago, el hígado y el páncreas con los que forma una unidad funcional y
recibe el quimo del estómago, las secreciones del páncreas y la bilis del
hígado. El colédoco y el conducto pancreático principal desembocan juntos en la
segunda porción del duodeno, en la ampolla de Vater o papila duodenal, en donde
existe un esfínter, el esfínter de Oddi que está relacionado, sobre todo, con
el control del flujo del jugo pancreático al duodeno ya que el flujo de bilis
hacia el duodeno está controlado por el esfínter del colédoco situado en el
extremo distal de este
conducto
biliar.
El yeyuno y el íleon constituyen la parte más extensa del intestino delgado,
en la que tiene lugar gran parte de la absorción de alimentos. Además, producen
hormonas que regulan la secreción y la motilidad gastrointestinal, y contienen
numerosas formaciones linfoides que hacen de esta parte del tubo digestivo un
verdadero órgano inmunitario de carácter secundario.
Se extiende
desde el ángulo duodenoyeyunal hasta el ciego, donde se abre por la unión
ileocecal a nivel de la fosa ilíaca derecha. Es un tubo cilíndrico, de longitud
muy variable; en el ser vivo tiene una longitud aproximada de 5-6 m. El yeyuno
y el íleon difieren algo en su morfología y en sus capacidades funcionales,
pero no hay un límite preciso entre ambos, sino más bien un cambio progresivo
que justifica la denominación conjunta de yeyunoíleon.
Para
acomodarse al espacio abdominal, el yeyunoíleon se pliega formando asas
intestinales.
En el yeyuno
se realiza la mayor absorción de nutrientes por lo que
presenta
mayores vellosidades intestinales, mayor grosor y mayor irrigación.
Las vellosidades
intestinales son proyecciones digitiformes de hasta 1 mm de longitud que,
en número de millones, revisten toda la mucosa intestinal y le dan un aspecto
aterciopelado. Hacia el íleon disminuyen de tamaño y de número. Las
vellosidades incrementan por diez la superficie de absorción. Las microvellosidades
son formaciones microscópicas que presentan de ribete de cepillo. Las
microvellosidades, en número de 2000-3000 por célula, multiplican por veinte la
superficie de absorción. Entre las vellosidades hay millones de orificios de
desembocadura de glándulas intestinales (glándulas de Lieberkühn).
Las vellosidades y las glándulas constituyen un complejo indisociable que se
denomina complejo vellosidad-glándula.
En los últimos
centímetros de íleon, que preceden a la válvula, la pared intestinal posee una
pared muscular engrosada, el esfínter íleocecal que, en condiciones normales,
se encuentra medianamente contraído y no permite que el contenido del íleon se
vacíe en el ciego de un modo brusco y continuado.
La función
primordial del intestino delgado es mezclar el quimo con secreciones digestivas
en la parte superior para luego digerir nutrientes y absorber nutrientes
vitaminas, minerales, electrolitos y agua en el resto.
El intestino
delgado es la parte del cuerpo donde se produce el 90% de la digestión y
absorción de los nutrientes, el otro 10% toma lugar en el estómago y en el
intestino grueso.
Intestino Delgado
Intestino Grueso
El intestino
grueso es la parte terminal del tubo digestivo y se extiende desde el íleon
hasta el orificio anal. Recibe este nombre por ser de un calibre mayor que el
intestino delgado. Mide aproximadamente 1.5 m. Consta de tres partes: ciego,
colon29 y recto. Al ciego está unido el apéndice vermiforme.
El colon dibuja una especie de marco en torno al yeyunoíleon y se divide, por
su trayecto, en una serie de partes: ascendente, transverso, descendente y
sigmoide.
El intestino
grueso se caracteriza por una serie de detalles morfológicos que lo diferencian
del intestino delgado.
a) Tiene mayor
calibre que el intestino delgado y va disminuyendo de proximal a distal.
b) La capa de
fibras musculares longitudinales se engruesa para formar tres franjas
musculares longitudinales denominadas tenias cólicas .
c) A lo largo
de la superficie libre del colon, y fijados a las tenias, se encuentran los apéndices
omentales (apéndices epiploicos). Son pequeñas evaginaciones
del tejido conjuntivo subseroso, llenas de grasa y cubiertas de peritoneo;
están en continuidad con el tejido conectivo y la grasa de los mesos
respectivos. No existen en el ciego ni el recto.
d) La
superficie ofrece un aspecto abollonado (Haustras cólicas) separados por
surcos, los cuales corresponden a los pliegues semilunares que
sobresalen en la luz del colon.
Las estructuras del intestino grueso son las siguientes:
- El ciego es un fondo
de saco de unos 8 cm de longitud y 8 cm de ancho que comunica con el íleon a
través de la válvula íleocecal.
- El apéndice
vermiforme
es una protrusión similar a un dedo de guante de unos 8 cm de longitud.
Comunica con el ciego a nivel de la parte pósteromedial de éste, a unos 3 cm
por debajo de la válvula íleo-cecal y es muy móvil. Su inflamación
(apendicitis) suele seguir a la obstrucción de su luz por heces.
- El colon
ascendente
tiene unos 15 cm de longitud y se extiende desde la válvula íleo-cecal hasta el
ángulo cólico derecho o ángulo hepático (a nivel de la cara inferior del lóbulo
derecho del hígado), en donde gira para continuarse con el colon transverso.
- El colon
transverso
tiene unos 50 cm de longitud y se extiende
- transversalmente
hasta el ángulo cólico izquierdo o ángulo esplénico en donde el colon gira para
continuarse con el colon descendente.
- El colon
descendente
es la porción más estrecha del colon. Tiene unos 30 cm de longitud y se
extiende desde el ángulo esplénico hasta el borde de la pelvis.
- El colon
sigmoide
tiene unos 40 cm de longitud y se extiende desde el borde de la pelvis hasta la
cara anterior de la 3ª vértebra sacra.
- El recto tiene
unos 12 cm de longitud y se extiende desde el colon sigmoide hasta el conducto
anal. Se encuentra en la parte posterior de la pelvis. Por su parte distal se
ensancha y forma la ampolla rectal.
- El conducto
anal
es la porción terminal del tubo digestivo, se encuentra fuera de la cavidad
abdominal y en la unión recto-ano hay una transición brusca del epitelio de la
mucosa intestinal que pasa a ser plano estratificado no queratinizado, ya que
es una zona más expuesta a las abrasiones. Este conducto tiene unos 4 cm de
longitud, se abre al exterior por un orificio llamado ano y en él se distinguen
2 esfínteres, el esfínter anal interno y el esfínter anal externo. El esfínter
anal interno es un engrosamiento de la musculatura lisa circular del recto y
rodea los 2/3 inferiores del conducto anal. Es involuntario. El esfínter anal
externo rodea el conducto anal y se superpone, en parte, al esfínter interno.
Está integrado en la musculatura estriada esquelética del suelo de la pelvis. Es
un esfínter voluntario desde los 18 meses de edad aproximadamente.
El intestino
grueso está especializado en la absorción de líquidos y en la
elaboración de las heces.
El intestino
grueso absorbe la mayor parte del agua y electrólitos del quimo que pasa
por la válvula ileocecal; de esta forma, el organismo recupera estos elementos
cedidos por las secreciones digestivas (puede llegar a absorber hasta siete
litros de líquido). Los restos no digeridos forman las heces, las cuales son
parcialmente destruidas por bacterias colónicas mediante procesos de
fermentación y de putrefacción. Segrega moco y bicarbonato para neutralizar la
acidez bacteriana. Los restos finales se depositan en la parte distal del colon
y se eliminan al exterior en la defecación.
El intestino grueso
ESTRUCTURAS ACCESORIAS
Dientes
Los dientes son órganos digestivos accesorios implantados en los
alvéolos dentarios situados en los bordes alveolares de la mandíbula y del
maxilar superior. En la especie humana aparece primero un grupo de dientes, los
dientes de leche o primarios que son temporales, y son 20 piezas. Comienzan a
aparecer hacia el 6º mes de vida y se completan al final del 2º año.
Alrededor de los 5 años los dientes
permanentes sustituyen a los primarios y no se completan
hasta después de los 20 años, alcanzando los 32 dientes en total.
Los dientes tienen las siguientes funciones:
- La captura o sujeción del alimento
- La división o separación de una parte del alimento, antes de
introducirlo en la boca
- La masticación o conversión de las partículas grandes de alimento en
otras más pequeñas.
Las 2 primeras funciones las realizan los incisivos y caninos porque
tienen bordes cortantes. Los premolares y molares que tienen amplias
superficies planas, mastican el alimento. Los músculos masticadores, trabajando
juntos, pueden cerrar los incisivos con una fuerza de 25 Kg y los molares con
una fuerza de 90 Kg.
Cada diente se
compone de una corona, cuello y raíz; la corona está cubierta por esmalte,
mientras que el cuello y raíz por cemento. Interno al cemento y el esmalte se
ubica la dentina que encierra una cavidad pulpar con terminaciones nerviosas.
El diente articula con la mandíbula o maxilar por medio de un ligamento
periodontal que no permite movilidad (articulación sutura tipo gonfosis).
Cada diente tiene
una tarea o función específica (utilice el arco dental en esta sección para
localizar e identificar cada tipo de diente):
- Incisivos (8):
dientes anteriores con bordes afilados en forma de cincel (cuatro superiores y
cuatro inferiores), utilizados para cortar los alimentos.
- Caninos (4):
dientes con forma puntiaguda (de cúspide) que se utilizan para desgarrar los
alimentos. También se les denomina colmillos.
- Premolares (8):
estos dientes tienen dos cúspides puntiagudas en su superficie de masticación.
A veces son denominados bicúspides. La función de los premolares es aplastar y
desgarrar.
- Molares (12):
utilizados para moler, estos dientes tienen varias cúspides en su superficie de
masticación.
Los dientes se
dividen en tres partes: la corona, el cuello y la raíz:
- Corona: es la parte
visible del diente que queda expuesta.
- Cuello: es la parte
del diente que une la corona del mismo con su raíz, está en la encía marginal.
- Raíz: esta parte no
se ve cuando el diente está sano, ya que se encuentra dentro del hueso
alveolar. En su interior hay el conducto radicular y la pulpa dental, tejidos
que pueden verse afectados cuando una caries es muy profunda.
Además de
estas partes básicas del diente, hay otras partes importantes que forman la
pieza dental, son sus diferentes tejidos:
- El esmalte: es el tejido
duro que recubre la superficie de la corona. Es liso y de color blanco, resiste
muy bien la abrasión que se produce con la masticación pero no soporta de la
misma forma los ácidos, que atacan su mineralización, una característica clave.
- La dentina: es el primer
tejido que encontramos tras la capa de esmalte. Es de color amarillento y su
función consiste en proteger la pulpa de las partículas externas al diente. No
es igual de dura que el esmalte, por lo que se gasta rápidamente si está
expuesta a la masticación, situación en la que puede provocar una mayor
sensibilidad dental.
- La pulpa
dental:
Es el tejido blando del diente y en él se insertan los nervios y los vasos
sanguíneos. De hecho el dolor dental proviene directamente de ella. Se
encuentra tras la dentina y es la capa más interna del diente.
- El periodonto: son los
tejidos que tienen la función de fijar el diente al hueso. Además, cumplen una
función sensitiva al transmitir la sensación del apretamiento. Se divide en el
cemento radicular, el ligamento periodontal, el hueso alveolar y la encía: Cemento
radicular: es la parte más externa de la raíz, es de color amarillo y
tiene un tacto rugoso. Ligamento periodontal: es el tejido
que une el diente al hueso alveolar. Le da fijación pero al mismo tiempo le
permite una cierta movilidad para que absorba mejor las fuerzas a las que está
sometido. Hueso alveolar: es la zona del maxilar en la que se acogen los
dientes. De no haber pieza dental, se reabsorbe. Encía: Es el tejido que
rodea y une tanto el hueso alveolar, como el ligamento periodontal y el mismo
diente. Además de cumplir la función de fijación, también ayuda al
mantenimiento de la salud del diente.
El diente y sus partes
Lengua
La lengua es
un órgano accesorio digestivo que se compone de musculo esquelético cubierto
con mucosa. Junto con los músculos relacionados con ella, forma el suelo de la
cavidad bucal. La lengua está formada por dos caras, una
superior o dorso y una inferior que descansa en el suelo de la boca,
en cuya línea media encontramos el frenillo,
los bordes linguales, la base de la lengua y la punta lingual.
El frenillo se
puede distinguir en el suelo de la boca. Se trata de un pliegue mucoso que une
la cara dorsal de la lengua con la mucosa del piso de la boca, de forma
semilunar. Tiene la función de limitar los movimientos de la lengua para evitar
que la traguemos.
La lengua
tiene varios roles, por un lado en la alimentación permite la succión, deglución y masticación. Es importante
succionar y para formar el bolo alimenticio. También la lengua nos permite
comunicarnos oralmente con el habla, y percibir los estímulos sensoriales del
gusto.
El dorso o
cara superior y las caras laterales de la lengua están recubiertos de papilas,
las cuales son prolongaciones de la lámina propia recubiertas de epitelio
queratinizado. Muchas papilas contienen botones gustativos, que son los
receptores del gusto. Las papilas fungiformes son proyecciones a manera de
hongo distribuidas entre las papilas filiformes y resultan más numerosas cerca
de la punta de la lengua. Se observan como puntos rojos en la superficie de
este órgano y muchas de ellas contienen botones gustativos. Las papilas
circunvaladas forman una V invertida en la cara posterior de la lengua y todas
poseen botones gustativos. Por último, las papilas filiformes son proyecciones
cónicas blancuzcas distribuidas en filas paralelas sobre los dos tercios
anteriores de la lengua. Aunque carecen de botones gustativos, aumentan la
fricción entre la lengua y los alimentos, lo cual facilita a dicho órgano mover
las partículas de alimentos en la boca.
Tenemos hasta
10,000 papilas gustativas que distinguen lo dulce, ácido, amargo, salado y
sabor umami (proviene del japonés y significa sabor agradable). Cuando la
comida se disuelve en la saliva llega a las células receptoras de las papilas
gustativas, éstas se estimulan y mandan señales a la corteza cerebral. Los
receptores de la lengua también responden a otros estímulos como el dolor, la
temperatura y la presión.
La lengua se
compone de ocho músculos; cuatro de ellos extrínsecos, unidos al hueso (cambian
la posición de la lengua) y cuatro intrínsecos, no unidos al hueso (cambian la
forma de la lengua). Estos músculos empujan la comida mientras masticamos para
que podamos tragarla, además nos permiten hablar. La lengua se combina con los
labios, la mandíbula y las mejillas para articular los sonidos que salen de las
cuerdas vocales.
En la mucosa
de la lengua se encuentran las glándulas linguales que secretan líquidos
serosos y mucosos que contienen el enzima lipasa lingual que actúa sobre las
grasas de los alimentos.
Glándulas salivales
La salivación
es la secreción de saliva por las glándulas salivares, que en el ser humano es
de alrededor de 1 litro por día. Las glándulas salivares están situadas por
fuera de las paredes del tubo digestivo. Las más importantes son: las parótidas,
las submaxilares y las sublinguales. Son estructuras pares o sea que hay 6
glándulas salivares mayores, aunque existen otras pequeñas.
Las glándulas
parótidas están formadas exclusivamente por células serosas que producen una
secreción acuosa desprovista de moco. Contribuyen al 25% de la secreción total
de saliva en reposo. Cada parótida está situada entre la rama de la mandíbula
por delante y la apófisis mastoides por detrás y tiene un conducto que desemboca
en la superficie de la mucosa de la mejilla por encima del 2º molar superior.
Está atravesada por la arteria carótida externa y el nervio facial.
Las glándulas
sublinguales y las glándulas submaxilares están formadas por células mucosas y
serosas y situadas por debajo de la mucosa del suelo de la boca, en donde
desembocan por varios conductos. Las glándulas Submandibulares contribuyen a un
70% de la secreción de saliva en reposo y las sublinguales al restante 5%.
Glándulas salivales
Páncreas
El páncreas es
una glándula accesoria del tubo digestivo que está conectada al duodeno por dos
conductos secretores, manteniendo con él una estrecha relación anatómica. Es
una glándula mixta, exocrina y endocrina. Glándula exocrina porque segrega jugo
digestivo que llega a la cavidad del duodeno. Tiene una estructura similar a la
de las glándulas salivares, ya que tiene células secretoras agrupadas (los
acini o acinos) que vierten sus secreciones a conductos que se van haciendo mayores
hasta formar los conductos pancreáticos.
Glándula
endocrina porque segrega 2 hormonas principales: el glucagón y la insulina que
pasan a la sangre. Las células endocrinas se disponen en los islotes de
Langerhans que están separados del tejido exocrino. El páncreas tiene una forma
alargada y aplanada y se localiza en la parte izquierda del abdomen, en
posición transversal con respecto a los cuerpos de las vértebras lumbares
superiores. Tiene una longitud de 12-15 cm y pesa unos 100 gr. Con propósitos
descriptivos se distinguen 4 partes: cabeza, cuello, cuerpo y cola. La cabeza está
colocada dentro del marco duodenal y se relaciona por detrás con la arteria
aorta, la vena cava inferior, la vena porta y el colédoco. El cuerpo y la cola se
relacionan, respectivamente, con el riñón izquierdo y el bazo. Por delante se interpone
peritoneo entre el páncreas y la cara posterior del estómago. El páncreas es,
pues, un órgano retroperitoneal.
En su interior
se encuentra el conducto pancreático principal de Wirsung, que comienza en la
cola del páncreas y viaja a lo largo del parénquima de la glándula.
Al llegar a la
cabeza se ramifica y da lugar al conducto de la cabeza que desemboca en el
duodeno, en solitario. En cambio, el conducto de Wirsung se une con el colédoco
y ambos desembocan juntos en la segunda porción del duodeno, en la ampolla de
Vater o papila duodenal, en donde existe el esfínter de Oddi que está
relacionado, sobre todo, con el control del flujo del jugo pancreático al duodeno.
Por su parte, el flujo de bilis hacia el duodeno está controlado por el esfínter
del colédoco situado en el extremo distal de este conducto biliar.
El páncreas
Hígado
Es la mayor
glándula del cuerpo, y uno de sus órganos más complejos. Se ubica en el costado
superior derecho de la cavidad abdominal, cubriendo parcialmente al estómago.
Pesa de 1500 a 2000 gramos, es de color rojizo y de forma ovalada o ligeramente
piriforme y su diámetro mayor es de unos 8 a 10 cm. El hígado está constituido
por formaciones diminutas que reciben el nombre de lóbulos hepáticos que tienen
forma hexagonal; están compuestos por columnas de hepatocitos. A diferencia de
cualquier otro órgano, el hígado tiene dos vías por las que recibe sangre: la
arteria hepática transporta sangre oxigenada procedente del corazón, y la vena
porta, que transporta sustancias alimenticias desde el estómago y los
intestinos.
Es una
glándula accesoria del tubo digestivo. Ocupa el hipocondrio derecho, y parte del
epigastrio y del hipocondrio izquierdo. Está situado debajo del diafragma y
suele estar cubierto por las costillas
5-10. Se mueve
con la respiración y varía también su posición con cualquier cambio postural
que afecte al diafragma ya que está sujeto a la pared abdominal anterior y a la
cara inferior del diafragma mediante el ligamento falciforme que es un pliegue peritoneo
y que separa los 2 lóbulos hepáticos, uno derecho y otro izquierdo.
Presenta 4
caras: anterior, posterior, diafragmática y visceral. La cara diafragmática es
lisa y con forma de cúpula. Se amolda a la concavidad del diafragma que la
separa de las estructuras intratorácicas. La cara visceral presenta muchas
irregularidades. Se relaciona con el estómago, el duodeno, la vesícula biliar y
el colon. En ella se encuentra el hilio hepático por el que pasa la arteria hepática,
la vena porta, los conductos hepáticos derecho e izquierdo y vasos linfáticos.
Los 2 lóbulos
hepáticos están separados funcionalmente. Cada uno recibe su propio aporte de
la arteria hepática y de la vena porta y tiene su propio drenaje venoso.
En forma
similar, el conducto hepático derecho recoge bilis desde la 1/2 derecha del
hígado y el conducto hepático izquierdo recoge bilis desde la 1/2 izquierda del
hígado.
El hígado es
uno de los órganos que cumple más funciones en el organismo. Estas son:
- Producir y
secretar la bilis, sustancia que hace soluble las grasas, facilitando la
digestión.
- Almacenar
glucosa, en la forma de glucógeno, un hidrato de carbono más complejo.
- Almacenar
hierro y vitaminas.
- Sintetizar
muchas proteínas presentes en la sangre, como por ejemplo las albúminas.
- Desintoxicar
medicamentos y venenos que ingresan al cuerpo.
- Eliminar
glóbulos rojos viejos (seniles).
- Participar en
el metabolismo de grasas, hidratos de carbono y proteínas.
El hígado
Vesícula Biliar
Es una víscera
hueca pequeña, con forma de ovoide o pera, que tiene una longitud aproximada de
8 cm y un diámetro de 3 cm. Se localiza en una concavidad de la capa visceral
del hígado bajo la superficie del lóbulo derecho, justo detrás de las costillas
inferiores. Se conecta con el intestino delgado (duodeno) por la vía biliar (el
conducto cístico y luego por el colédoco).
Contiene unos 50 ml de bilis.
Funciones:
Almacenar la bilis segregada por el hígado, hasta ser requerida por el proceso
de la digestión. Cuando funciona con normalidad, la vesícula vacía su contenido
a través del conducto biliar (colédoco) en el duodeno para facilitar la
digestión, favorece los movimientos intestinales y la absorción, evita la
putrefacción, y emulsiona las grasas.
Composición de la bilis
La producción
diaria de bilis oscila entre 800-1000ml. Con un pH alcalino que oscila entre
7´6-8´6. Va a permanecer almacenado en vesícula biliar. Se sintetiza en el
hepatocito y conforme la sintetiza, la va guardando en la vesícula biliar y cuando
esta vesícula biliar recibe estímulos de contracción la bilis pasa al duodeno.
Se compone
principalmente de agua, ácidos biliares, sales biliares, la principal función
de las sales biliares va a ser la emulsión de grasas, lo que favorece la acción
de las lipasas.
Además de
intervenir en la emulsión de grasas, va a proporcionar solubilidad del colesterol
en la bilis y va a intervenir la absorción de vitaminas A, D, E, K.
Además de
ácidos biliares y sales biliares contiene colesterol (soluble), lecitina y bilirrubina.
La bilirrubina procede de la degradación hepática de la Hemoglobina, la bilirrubina
sufre un proceso de conjugación hepática y es eliminada por la bilis.
La vesícula biliar
El peritoneo
El peritoneo
es una membrana serosa que recubre las paredes y las vísceras de la cavidad
abdominal. Presenta relaciones importantes con gran parte de las vísceras del
tubo digestivo. El peritoneo reviste la cavidad abdominal con su hoja parietal,
llamada peritoneo parietal, mientras que su hoja visceral, peritoneo visceral,
recubre los órganos digestivos que se encuentran en el interior de la cavidad
abdominal (órganos peritonizados), formando pliegues llamados mesos. Entre las
hojas visceral y parietal del peritoneo se delimita un espacio virtual, la
cavidad peritoneal. Esta cavidad posee una pequeña cantidad de líquido que
favorece el desplazamiento de las vísceras digestivas, evitando que se
produzcan adherencias entre ellas.
El peritoneo
REFERENCIAS
Gardner-O´Rahilly.
(1995) Anatomía.
Francone, H.
(1987) Anatomía y Fisiología Humana.
Moore, k. y
Dalley, A. (2007).Anatomía con orientación clínica
Tortora /
Derrickson. (2007) Principios de
Anatomía y Fisiología, 11edición.
Editorial Panamericana.
Guyton. Tratado de Fisiología Médica. 11ª ed. Madrid: Elsevier España.2006.
Latarjet-Ruiz
Liard Anatomía Humana, Ed. Panamericana, 2004
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